En mayor o menor medida, todos hemos sufrido episodios de ansiedad en alguna ocasión. Los trastornos de ansiedad se producen cuando la sensación de angustia se intensifica y se repite de forma frecuente o durante largos períodos de tiempo.
Existen diferentes tipos de trastornos de ansiedad, siendo el más común el trastorno de pánico. Este trastorno presenta importantes síntomas fisiológicos, como sudoración excesiva, mareos o nauseas, que si no se saben controlar pueden derivar en problemas como taquicardias o adormecimiento de determinadas partes del cuerpo.

Sufrir una crisis de ansiedad es una experiencia tan negativa que la mayoría de las personas que las sufren acuden a urgencias, pensando que los síntomas que padecen tienen un origen orgánico, cuando en realidad son causados por un estado de hiperactivación del sistema nervioso que en absoluto es peligrosa para la salud.

Cuando se produce uno de estos episodios conviene acudir a la consulta de un psicólogo especializado en el tratamiento de la ansiedad lo antes posible. Cuando aparece una crisis por primera vez,  es muy probable que los ataques se repitan, pudiendo incluso aparecer síntomas de agorafobia. En las personas que han sufrido ataques de ansiedad, la agorafobia provoca un intenso miedo a encontrarse en situaciones o lugares en los que en el caso de sufrir un ataque de ansiedad resultaría difícil escapar de la situación. Por este motivo, es muy común que las personas agorafóbicas cambien sus costumbres o eviten realizar ciertas actividades que consideren que pueden hacerles revivir un nuevo episodio de ansiedad, lo cual les puede ocasionar problemas a nivel personal, familiar o incluso laboral.

Hace muchos años que trato estos problemas y en mi terapia combino las técnicas de exposición interoceptiva y las de exposición con prevención de respuesta, que son las que presentan una evidencia científica mas elevada sobre su eficacia.

Después de tratar a más de 300 pacientes que han sufrido ataques de pánico, ahora también ofrezco el Tratamiento a través de videollamada desde la web de eStabilitas.

En la primera consulta evalúo el contexto en el que se produjo la primera crisis de pánico, y los síntomas que se sintieron. En esta primera fase es muy importante detectar si realimente se ha sufrido una crisis de ansiedad o el paciente sufre algún problema fisiológico que produce síntomas similares.

Una vez confirmo que se trata de una crisis de ansiedad, explico a mis pacientes como reacciona el organismo cuando se produce una crisis de ansiedad con el objetivo de que entiendan perfectamente que les ha sucedido. Al finalizar la sesión,  les presento el Plan de Tratamiento que seguiremos para evitar que se vuelva a producir una crisis de ansiedad.

Más del 85% de los pacientes que he tratado por problemas de ansiedad han quedado totalmente libres de la sintomatología que acompaña las crisis de pánico. La eficacia de este tratamiento es tan elevada porque se basa en la Terapia Cognitivo-Conductual, la cual tiene una potente solidez científica.

Artículo escrito por la Psicóloga Gemma Figueras